¡Buenos días! De 'buenos' tiene poco.

Mi nombre es Alicia. y tengo 19 años. Cabe destacar que me diagnosticaron depresión y ansiedad hará unos 6 años, y llevo arrastrando este sufrimiento durante toda esta "temporada". Pasé por muchas etapas de mi vida, y puedo decir muchas de ellas, pero sería demasiado largo de explicar. Por ahora me limitaré a decir lo más importante; y realmente, ésto lo puede leer a quién el apetezca, pero el que comente, espero que sea un comentario coherente o al menos si critican, que sea una crítica constructiva.

× Pues aquí empieza mi historia, una historia llena de soledad y de pocas cosas buenas, nací un 24 de Diciembre de 1996 en Polonia. A pesar de nacer ahí, he vivido la mayor parte de mi vida en España, Barcelona, por que mi padre tenía trabajo ahí, y finalmente nos acabaríamos mudando allí mismo. Ésto fue un error, un completo error. El ambiente de España, las personas de ahí (o la mayoría de personas) me han hecho sentir tantas cosas, que he acabado completamente destrozada. Desde pequeña he sufrido maltrato,tanto yo, como mi madre, tanto psicológico como físico. Nunca me he podido quejar a nadie, por el hecho de que si lo hacía el dolor sería más grande, y obviamente; tarde o temprano moriría, ya que me había amenazado con lo mismo. Mi padre tenía una empresa de alta calidad, cobraba más de cuatro mil euros por mes, y a pesar de ello, lo único que dejaba era diez euros para poder comprar algo durante todo el día; claro estaba, en aquella época estábamos en crisis, y apenas podía comer una cucharada de arroz con tomate y un misero huevo para comer, había veces en las cuáles la pobreza nos inundaba, y veía a mi madre llorar, delante mío, dándome el plato, sintiéndose completamente destrozada. Durante la época de mi infancia, desde los tres años, hasta los siete no fueron tan mal, aún era feliz, con pocas cosas era feliz, los problemas aún no eran tantos y básicamente, las cosas no me importaban tanto como ahora; no sabía como era la vida en realidad. Desde los siete años hasta los trece, empecé a sentir leves síntomas de depresión, mi día a día se hacía completamente largo; sólo pensaba en dormir y en no hacer nada, no tenía ganas de nada, y lo peor de todo es que siquiera tenía las fuerzas necesarias para poder levantarme de la cama, cada día era un día menos de mi vida, un día menos para morir. Mi padre a pesar de ello seguía maltratandome tanto psicológicamente como físicamente, entre que no recibía apoyo de nadie, siquiera de mi madre, todo comenzó a ir de mal a peor, era horrible. Empecé a bajar en los estudios, suspendiendo hasta tres materias por semestre; mi madre no sabía qué me pasaba, nadie lo sabía. Siempre que mis padres me preguntaban si estaba bien, yo simplemente contestaba con un misero 'sí con la cabeza' sonriendo entre dientes, mientras que por dentro estaba completamente muerta. Lo bueno de mis doce-trece es que tenía por fin; mi primera pareja, era virtual, era de Internet, pero era una pareja que realmente valía la pena, que me hizo sentir cosas desde la A hasta la Z, era todo muy bonito; hasta que después de un año y seis meses de estar juntos (a finales de mis trece) rompimos. El mismo día de mi cumpleaños (el 24 de Diciembre) fue mi primer intento de suicidio, obviamente, en ésa época ya comencé a cortarme por unas amigas, pero no sabía realmente para qué servía, hasta que probé intentar suicidarme con la cuchilla, me corté verticalmente y me desangré. Mis padres me encontraron "casi incosciente y casi muerta" en la cama de mi habitación, mientras toda la cama estaba manchada de sangre, unos cuantos minutos más y me daban por muerta. A pesar de ello, mis padres, ambos ésta vez, decidieron llevarme a un psicólogo y a un psicoterapeuta, creyendo que así las cosas irían mejor, aún que fueron a peor. Empecé a fumar y a beber en aquella época con mi mejor amiga, y mis padres no se daban cuenta por el hecho de que mi padre fumaba, y a mi madre no la veía en todo el día, ambos trabajaban durante todo el día y no recibía atención ninguna. No niego que la ayuda profesional me vino bien, aún que encontré formas para relajar mi ansiedad (que ya tenía, diagonsticada por un profesional), que era fumar y beber, en mi cabeza no me entraba que aquellas dos cosas me hacían daño, completamente, y que en un futuro podrían romperme en mil pedacitos, más de lo que ya estaba rota. Mi mejor amiga y yo fumábamos casi cada día, por las mañanas, y bebíamos casi cada mediodía, quedábamos unas cuantas veces para fumar y beber, entre otras, para contarnos problemas mutuamente. Ella tenía depresión, yo depresión y ansiedad, dos mejores amiga juntas, ambas con depresión, ¿qué podía salir bien de ello? Nada. Ambas nos intentamos suicidar a finales (otra vez) de nuestros 14, a base de pastillas y alcohol, como en los viejos tiempos. Mi mejor amiga estuvo a punto de morir, nos encontraron en un parque al lado de nuestra casa, nos encontró un hombre llamado Alex. Por fin sabía que era el amor, aquél hombre tenía diecisiete años y volvía borracho de una fiesta, según el había dicho, nos había esperado durante toda la noche, y su preocupación era inmesa. Al final, acabamos siendo pareja, pero lo dejamos poco más de un año por el hecho de que si estábamos juntos, se trataría de pedofilia. Volví a suicidarme, ésta vez en la bañera de mi casa (como aquél famoso gif, JAJA), la llené de agua, y comencé a cortarme como si no hubiera un mañana, llené la bañera de sangre, y por suerte, otra vez, mis padres me descubrieron porque llegaron a casa más temprano de lo usual, no respondía a sus mensajes. Alex volvió a visitarme, mi mejor amiga también; eran mis únicas dos fuentes de apoyo. A pesar de lo ocurrido, mi amiga y yo seguíamos fumando y bebiendo, casi cada día. Las cosas empeoraron cuando tuve mis diecisiete, empecé a salir de nuevo con Alex y hasta a día de hoy no lo hemos dejado. Conocí a muchos amigos por Internet, y comencé a salir a fiestas muy populares o a discotecas de mucha fama. Conocí lo que era la Marihuana, la Heroína, y el Éxtasis, "gracias" a un grupo de amigos. Mis amigas eran escasas, no me caía bien con las mujeres, por x razón. Hace poco, mi padre murió de un ataque al corazón, fumaba y bebía demasiado (quizás he heredado de él esto.) por lo tanto, llegó su hora de morir. Me intenté suicidar hace poco como en los viejos tiempos, a base de pastillas, otra vez, y por última supongo, mi mejor amiga me pilló inconsciente. Tuve una intoxicación de la cuál casi estaba a punto de morir ya que no daba señales de vida. Por suerte, ahora estoy escribiendo este post, y espero que alguien me de algunas fuentes de apoyo también extras. Hasta el día de hoy, mantenemos éste grupo de amigos, algunos más pobres que otros, aún que ellos a día de hoy, son mi fuente de apoyo. Sigo yendo al psicólogo y al psicoterapeuta, y por otra parte, comienzo mi carrera de Magisterio; sin ganas, como siempre.

Muy resumido.